El sangrado de las encías es un signo de enfermedad y, si no se trata adecuadamente, puede derivar en periodontitis, una infección profunda de la encía y el resto de tejidos que sujetan el diente, lo que puede provocar su pérdida. (1, 2)

El sangrado de las encías es un signo de enfermedad y, si no se trata adecuadamente, puede derivar en periodontitis, una infección profunda de la encía y el resto de tejidos que sujetan el diente, lo que puede provocar su pérdida. (1, 2)
El tabaco disminuye las defensas de las encías haciendo que queden más expuestas al ataque bacteriano y resultan más susceptibles a la infección periodontal. Por este motivo, los fumadores tienen hasta tres veces más riesgo de desarrollar una periodontitis.
La boca no es un sistema aislado y una infección oral crónica, como la periodontitis, puede conllevar la entrada de bacterias en el torrente sanguíneo y llegar a afectar a todo el cuerpo.